Son muchos los motivos por los que nos encontramos con la necesidad de buscar piso.
Si tu decisión al respecto es optar por el alquiler, bien porque no cumples los requisitos para poder contratar una hipoteca, o bien, porque quieres gozar de la libertad de movimiento que te aporta esta modalidad, tienes que tener en cuenta, que nos encontramos en pleno boom.
La escasez de oferta y el crecimiento de la demanda en este sector ha producido un incremento de los precios, tanto en el alquiler de inmuebles completos, como en el de submercados, como el alquiler de habitaciones. No se registraba una subida parecida desde el año 2007, justo antes de estallar la «burbuja inmobiliaria». Con estos datos, el arrendador está en posición de elegir precio e inquilino.
Hoy te ofrecemos unos consejos a tener en cuenta en la búsqueda de tu futuro hogar.
– Lo primero y más importante, es definir el presupuesto del que disponemos. Intentaremos, en la medida de lo posible, que el precio del alquiler no supere el 35% de nuestro salario neto. Una vez, hayamos echado cuentas y tengamos claro el importe que podemos asumir, hay que decidir qué queremos que incluya la vivienda, en cuanto a número de habitaciones, garaje, trastero, piscina, si lo queremos amueblado o vacío…
– Llegar antes, es casi tarde. Hay una larga lista de candidatos esperando ese inmueble. Crear alertas en los portales inmobiliarios, es una buena opción para enterarte el primero de las viviendas que salen al mercado. Si te interesa alguna, concierta una cita lo antes posible para verla.
– Ten la documentación a punto: DNI o pasaporte, últimas nóminas, declaración de la renta.
– Cuidado con los timos: pisos aparentemente ideales por precios muy inferiores a los del mercado. Pagos por adelantado sin conocer al propietario o intermediario o sin haber visto la vivienda.
Una vez encuentres lo que buscas:
– Como arrendatario no estás obligado a adelantar ningún importe a la firma del contrato, aunque sí es legal que se te exija un a modo de señalización”, el cual no supere la horquilla de entre 100 y 200 euros.
– Intenta que el contrato de alquiler sea lo más detallado posible y si contempla un inventario de lo que hay en el inmueble (incluyendo fotos), mejor. Presta atención a lo que firmas para que no haya sorpresas.
Para ampliar información de las cláusulas puedes consultar la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU).
Si consideras que estás invirtiendo demasiado tiempo en la búsqueda de algo que no se acerca ni un poquito a tus expectativas, y crees que puedes acceder a la compra de una vivienda, desde Wome te asesorarán de lo que más se adecúa a tus necesidades y recursos.
Suerte!!
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